
Teresa andaba nerviosa. Se acababa de ir su marido y en una hora volvería juan y no sabia lo que quería. Su mente le decía una cosa y su cuerpo otra. Se había dado una ducha y andaba con una bata de baño corta intentando decidir que ponerse cuando sonó el timbre de la puerta.
Por lo nervios fue a abrir la puerta pensando que era su marido que se habíaolvidado de algo y al abrir de aquella guisa se encontró a juan y a otro hombre que no conocía, cargado con herramientas.
- ves, ya te dije que estaba de muerte
- ya lo veo – dijo con acento sudamericano
los dos entraron sin ningúnpreámbulo mientras teresa cerraba la puerta. Y al darse la vuelta se encontró a juan, que sin cortarse le dio un morreo con una de sus manos en sus nalgas.
- menuda perra estas hecha, y quieres guerra de buena mañana
- es que has venido mu pronto, iba a vestirme
- no no, esta perfecta, dijo arrinconándola contra la pared.
Teresa miraba al hombre y mientras juan deshizo el nudo de la bata que ella intento en mano dejar cerrada. Juan sin mediar palabra abrióbruscamente la bata y dejo todos sus encantos al descubierto. Con firmeza hizo que subiera los brazos arriba de la cabeza y comenzó a besarla mientras una de sus manos exploraba su coño encharcado.
- pero que puta eres
teresa avergonzada no reacciono cuando juan se despojo lentamente de su ropa y monstruoso pene totalmente erecto apuntando al techo, ni cuando se acerco a ella. Solo cuando agarrando sus nalgas la hizo y la estrecho contra la pared lanzo un gemido de sorpresa. Noto como la herramienta tanteaba y no tardo en encontrar la cueva que deseaba profanar. En ese momento la dejo caer un poco y sintió de nuevo el placer. Sus piernas y sus brazos abrazaron al hombre que la invadía y este comenzó a empotrarla literalmente. La envestía con fuerza en aquella postura tan acrobática, y aun así, se notaba ligera en sus fuertes brazos.
No tardo en sentir el orgasmo, tan fuerte y desgarrador como el día anterior, y a partir de ahí fue una muñeca a merced de juan, que la machaco durante diez minutos mas hasta vaciarse en su interior sin el menor atisbo de culpa.
- Joder que ganas tenia de follarte – dijo soltándola, ahora arrodillate y limpiame bien la polla que tengo que trabajar
Teresa lo miro con ojos de resignación, nunca el gusto el oral, pero la mirada de juan la doblego y se arrodillo quedando ante su decaído pero pringoso pene y muy despacio comenzó a lamerlo.
- métetelo en la boca, ostias – dijo enfadado, y teresa no tardo en engullirlo – así, que bueno, cometelo, joder, que gusto.
Teresa andaba concentrada en la mamada que torpemente de hacia a cuan cuando noto algo caliente en su mejilla. Y al abrir los ojos el tremendo pollón que se gastaba román, pedía su atención.
- venga, comésela, que el pobre hace tiempo que no le dedican atenciones.
Teresa se quedo de piedra, pero juan no la dejo ni pensar, la agarro del pelo y la enfilo al pene de román que no tardo en ser tratado convenientemente.
- que boquita tan caliente
- te gusta eh cabrón
- joder, que bueno
román no tardo en sentir que se corría, la visión del polvo anterior y su falta de sexo le pasaron factura, y agarrando la cabeza de teresacomenzó a inundar la boca de teresa con varios chorros de espesa y abundante leche. Forzada a tragar, teresa se deleito con su primer atracón le leche, aun que parte se escurrió por su boca y su nariz. Cuando el termino y la soto comento a toser mientras babeaba sobre su bata.
- vena guarrilla, nosotros vamos a trabajar, así que limpiate que igual luego tienes mas.
Teresa limpio como pudo el suelo con su bata y se dirigió a la ducha mientras ellos desaparecían en la habitación para seguir con la obra. Cuando se aseo, te dejo caer en la cama sin mas pretensión que descansar.
Román se acerco a la habitación y vio a teresa en la cama, y sin hacer ruido se desnudo y se metió entre sus piernas comenzando a comer aquel coño tan sabroso. Teresa despertó de su sopor sintiendo un agradable placer en su zona intima, y descubrió horrorizada como román le devoraba el sexo, intento zafarse pero el la tenia bien agarrada y su tratamiento solo hizo que excitarla, comenzó a gemir y sus brazos en vez de apartar apretaban la cabeza sobre su sexo.
Pero románquería mas, y en cuanto noto la humedad creciente de aquel coño no se demoro mas, trepo hasta ponerse encima y la perforo sin miramientos.
Teresa gimió de la impresión pero al momento, con el fuerte ritmo que román le propinaba, no tardo en comenzar a gemir y poco después a correrse y pedir mas y mas.
Elena se había cansado de llamar al timbre, y sin pensarlo abrió el portal con su juego de llaves. Quizás por la obra habíanquitado la luz pensó, mientras subía en el ascensor. Al llegar al ultimo piso donde vivía su hermana, nada mas salir, escucho los gemidos, estaba claro que los ocasionaba, pero lo extraño era que la mojigata y estrecha de su hermana fuera quien los emitiera.
Abrió la puerta con sigilo, su excitación era máxima, imaginaba a su hermana y su cuñado en una sesión de sexo salvaje y aquello no podíaperdérselo aun a riesgo de ser descubierta. Avanzó hacia la habitación conyugal de donde provenían sin ninguna duda los sonidos y cuando comenzó a atisbar la cama, supo que aquello era mas increíble.
Un cuerpo moreno enorme se movía sin descanso entre las piernas de su hermana, veía sus nalgas contraerse en cada envite, y oía a los dos gemir y hablarse.
- toma puta toma-
- si follame cabrón, me matas
Jodida hermana, la había sermoneado sin descanso por un par de infidelidades que le había confesado, y ella se los tiraba en su cama de matrimonio a grito pelado. Elena mezclaba la indignación y la excitación, y no podía dejar de mirar como aquel hombre se movía.
Su mano no tardo en buscar su sexo mojado, cosa que facilito su liviana falda corta y su tanga. Ensimismada en su placer tanto visual como manual, no se percato que juan, totalmente desnudo se aproximo a su espalda. Solo cuando su mano cerro su boca y se vio asida por otro brazo fuerte salio de su nube.
- shh, no te voy a hacer nada, soy el obrero que esta haciendo la reforma y ese que se esta beneficiando a la dueña es mi compañero, ¿y tu quien eres? - dijo susurrándole al oído y soltando suavemente la improvisada mordaza
- soy soy su hermana – dijo entre asustada y avergonzada
- y te estas haciendo una paja viendo como folla tu hermana?
- no, yo no
- no seas mentirosa, puedes seguir, o si quieres yo te ayudo
juan utilizo la mano que había cerrado la boca para agenciarse los pechos de Elena mientras su otra mano no tardo en encontrar el manjar oculto de la hermana
- vaya, tan zorra como tu hermana, encharcada
Elena asistía impasible al intenso tratamiento que juan le propinaba desde atrás y ademas sentía el duro miembro que se le clavaba en sus nalgas.
Elena contenía el inmenso placer que sentía, abrió las piernas para facilitar la tarea de juan, y dos dedos no tardaron en invadirla para su disfrute. Y con todo aquello oyó berrear al hombre que se apretaba sobre el cuerpo de su hermana.
- toma leche puta
- oh dios, dentro no
- uf, que gusto perra, pero no te preocupes, que aun me queda leche en las pelotas – y dicho esto se aparto le dio la vuelta poniéndola a cuatro patas y se la volvió a ensartar volviendo los gemidos a llenar la habitación.
Juan se deshizo de la ropa que portaba Elena rápidamente y totalmente desnuda la introdujo en la habitación. Ella se resistiópero no tardo en ceder cuando vio en todo su esplendor la polla que juan blandía.
Sin resistencia la tumbo al lado de su hermana y la empalo sin ningún tipo de delicadeza. Elena lanzo un grito que hizo que teresa se percatara de su presencia.
- dios no, Elena – dijo teresa que vio como juan la perforaba sin piedad haciendo que Elena gritara de placer
- joder que polla, me matas, si – gritaba Elena
la habitación se lleno aun mas de gemidos si cabe, y la cama traqueteaba sin medida con tanto ajetreo.
Después de diez minutos de desaforado e intenso movimiento ambos hombres vaciaron sus pelotas en sus respectivos coños y las dejaron allí tiradas, mientras volvían al trabajo.
- eres una zorra – le dijo Elena a su hermana cuando se repuso de la intensidad de sus orgasmos
- no Elena, te explico
- o sea, yo era una puta por tener aventuras y tu te los tiras a pares en tu cama
- es la primera vez, esto, no se como paso, balbuceó llorosa teresa
- venga vamos a ducharnos – dijo Elena compadeciéndose de la cara de pena de su hermana, pero sin poder entender aun muy bien el cambio que había presenciado.
Cuando salieron del baño juan y román ya recogian sus cosas.
- bueno, ya terminamos, mañana vendrá luis con el de las maderas y terminaran las puertas.
- y no volvéis - mas dijo teresa
Teresa se quedó esperando la respuesta mientras se iban y cerraban la puerta tras de si.
DOS AÑOS DESPUES
Teresa y Elena charlaban sentadas en el parque como cualquier par de hermanas, mientras el marido de teresa jugaba en el parque con su peque.
- Tu crees que sabe algo?
- no, menos mal que salio a juan, si sale al otro me da algo
y rieron
- este sábado tenemos cena
- con quien?
- con los negros, los del mes pasado, se ve que les gusto, y quieren repetir.
volvieron a reír a sabiendas de lo que iban a disfrutar.
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